La Costa de Alabastro : Etretat y Fécamp
La Costa de Alabastro se extiende por 130 kilómetros a lo largo del Canal de la Mancha. En particular, hay impresionantes paisajes de acantilados que a veces se elevan hasta 100 metros de altura. Al final de un valle arbolado, la pequeña ciudad de Etretat está llena de encanto. Un antiguo pueblo de pescadores que se convirtió en una ciudad costera en el siglo XIX, su principal activo radica en sus altos acantilados tallados por la erosión. El espectáculo que ofrecen es uno que debes haber visto al menos una vez en tu vida. Fécamp fue un gran puerto pesquero hasta la década de 1970. Fue aquí donde algunos de los famosos franceses de Terranova se fueron durante meses a realizar campañas en las afueras de Canadá. Además del puerto, Fécamp merece un desvío a la iglesia de la abadía de la Santísima Trinidad y los restos del palacio de los duques de Normandía, dos sitios medievales importantes a los que se agrega otro palacio, el de Alexandre Le Grand ... un industrial que , a mediados del siglo XIX, creó el licor Bénédictine.
La peninsula de Cotentin
Ubicada al norte del departamento de Manche, la península de Cotentin ofrece una maravillosa sucesión de paisajes que alternan entre pantanos, tierras de cultivo cubiertas, páramos, acantilados y costas salvajes. El lugar ideal para relajarse, alejarse de todo y respirar la espuma del mar. Su costa, entre otras la bahía de Écalgrain, la nariz de Jobourg y sus acantilados de granito, el cabo de Carteret, la punta de Barfleur o incluso la bahía de Veys, encantan a los caminantes y amantes del mar. costa a lo largo de los muros de piedra típicos de esta "Pequeña Irlanda", le permite apreciar plenamente la belleza de los paisajes costeros de Cotentin. En el corazón de este espacio natural sensible se encuentran sitios atemporales como Port Racine, el puerto más pequeño de Francia, o la casa del poeta Jacques Prévert ubicada en un "rincón del paraíso" en Omonville-la-Petite.
